Yo estaba jugando en ese campo de Monda, donde nací y donde estaba con parte demis hermanos y mis padres, Curro y Paca, ya que varios hermanitos se fueron un día y no volvieron. Cuando vi les vi aparecer. Entre juegos, observé a tres personas: dos mujeres y un chico. Estaban hablando con ese señor que venía siempre a mediodía y nos daba la comida. No se que hablaban, me señalaban con el dedo, pero sólo se que mi madre se echó encima de una de las dos mujeres que estaban, poniéndole las patazas encima. Luego, lógicamente me enteré que esas personas eran Begoña (mi ama), Luisa (que trabaja en la casa donde estoy ya viviendo) e Ibón (que junto a su hermano, vive en la casa).
Con lo bien que me lo estaba pasando con mis hermanos, de repente me vi en un coche, por una carretera llena de curvas... vaya, encima vomité por el mareo... menuda primera imagen les di a estas personas que parece que iban a ser mis nuevos dueños. ... el coche lo ensucié, ¡¡ qué vergüenza me dio...!! Pero yo sólo hacía pensar en mis padres y hermanos, que no los veía... y parece que no los iba a ver más.
En poco tiempo llegamos a una casa, y la verdad es que era muy bonita, pintada de color salmón y azul más o menos. Aunque tampoco es que me fijara mucho, tenía tanto miedo por estar con estas personas, desconocidas, que sólo quería salir corriendo para estar con mis hermanos. Y aunque no paraban estas personas de hacerme caricias, y decirme que iba a estar muy bien... ¡¡ yo sólo quería irme a mi casa !!.
Encontré un lugar perfecto para sentirme a gusto y protegido: debajo del coche en el que vine... allí estaba tranquilo (dentro del nerviosismo que habitaba mi interior), y sobre todo a salvo de todos. Aunque estas personas sólo hacían asomarse bajo este coche y decirme cosas, como "¡Urko, ven!", "Urko, qué guapo eres...". Pero en ese sitio estaba mejor que con nadie, y allí estuve hasta la noche.
Urko debe ser que ese es el nombre que me iban a poner. ¿Pero si a mi me llamaban antes "Jota"? Debe ser porque en el lomo tengo un mechón blanco que es una jota.
A última hora de la tarde conocí a otra persona más de la casa, ya que llegó en una moto ,Juan Luis (el hermano de Ibón), que venía vestido con un traje, corbata... muy elegante, debe trabajar en alguna oficina, en un banco o algó asi pensé. Junto con Begoña, consiguieron sacarme de debajo del coche (cachis, con lo bien que estaba alli...). Y ya luego, volvió a casa de nuevo Ibón, venía con un chandal (debe ser deportista, pensé), me cogió en brazos y me llevó dentro de casa, para que la conociera por dentro. Por cierto, qué agustito y calentito se estaba allí, qué pena que no me dejaran quedarme allí, con lo que bien que estaba... mmmmm con un aire calentito...
Les escuché decir algo asi como "si le dejamos ya el primer día porque nos da pena, nos pasará lo mismo que con Lagun, y no habrá quien la saque luego...". Debe ser que el perro que vivía aquí antes era una consentida y estaba siempre dentro, con todos ellos (jo que suerte, pensé tambien...). Lagun debía ser muy querida porque me pareció ver varias fotos del mismo perro, sería ella...
Yo, mientras, seguía pensando la forma en la que podría escaparme e irme con mis hermanos. Conseguí localizar un escalera que subía a una terraza. Entonces pensé que por ahí seguro que podría saltar e intentar buscar la carretera hacia Monda. Pero de repente, empezaron a poner obstáculos en el sitio que había descubierto para subir a la terraza, cerraron un portón grande de madera. No había forma de escaparme.
Me quedé esperando y dando vueltas por el jardin, buscando una alternativa para mi escapada. No encontré nada y observé como las luces de la casa se iban apagando. Qué sólo me vi en ese momento, me entró mucha tristeza y empecé a llorar desconsoladamente, aunque me salían -sin querer- una especie de aullidos.
Al momento siempre salían Ibon, Juan Luis o Begoña, y me quedaba algo más tranquilo, pero muy triste, no paraba de pensar en mis padres, en mis hermano, en ese campo en el que corríamos y jugábamos todos.... ¿por qué me habrán traido a esta casa?
Al rato de estar llorando, apareció Ibon y me llevó a una casa, muy grande por cierto, con una puerta de hierro que se cerraba, y con el nombre de Lagun sobre ella. Me cerró la puerta y me dejó sólo... asi toda la noche... asi pasé toda la noche.
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